“Al extranjero no lo maltratarás ni oprimirás, porque extranjeros fueron ustedes”
Éxodo 22
Expresamos nuestra indignación ante los trágicos acontecimientos que cobraron la vida de más de 40 personas en una estación migratoria de Ciudad Juárez. No podemos permitir que quienes buscan condiciones que aseguren mínimamente su vida encuentren la muerte de forma tan inhumana. En IMDOSOC nos solidarizamos con las víctimas y sus familiares por los injustos y trágicos hechos acontecidos.
Desgraciadamente este episodio no es un hecho aislado, sino una situación más que nos evidencia una gran crisis humanitaria; como indicó el Papa Francisco en 2016 en su visita a esa ciudad fronteriza. En el discurso oficial se afirma el respeto a los derechos humanos, sin embargo, en la realidad las personas migrantes de México y otros países principalmente de América Latina, no tienen aseguradas las más mínimas garantías y respeto a sus derechos humanos.
Al gobierno, de los tres niveles, les exigimos que se esclarezcan las circunstancias en que sucedió esta tragedia para que todos podamos conocer la verdad; así como los procedimientos adecuados para fincar responsabilidades civiles y penales de tan atroz situación. Exigimos también planes para mejorar la calidad de vida de quienes pasan por nuestro país y el respeto a sus derechos.
El derecho a la verdad va emparejado con el de no repetición como garantías de parte del Estado.
Esta exigencia es necesaria ante los niveles que ha alcanzado la política de detención y disuasión en nuestro territorio. La detención es un atentado grave a los derechos humanos de las personas migrantes. Exhortamos a las autoridades a revisar estructuras, protocolos, políticas, leyes y actitudes para asegurar los derechos humanos de todas las personas migrantes, refugiadas y desplazados forzosos.
Del mismo modo exigimos trato justo a las víctimas y sus familiares de tan lamentable acontecimiento; que se asegure la repatriación de los restos de las víctimas cuidando de la dignidad debida y de modo expedito como una expresión de la reparación, otro principio fundamental de la justicia.
A la sociedad la conminamos a ejercer la hospitalidad y acogida tradicional del pueblo mexicano y a no cultivar políticas xenófobas y de discriminación a personas pobres y violentadas obligadas a huir de sus lugares de origen.
En IMDOSOC creemos que la mejor forma de solidarizarnos es articular acciones, reconocer e integrar el trabajo de la sociedad civil, ampliar la red de apoyo mediante sinergias para que los migrantes, especialmente los más vulnerables, no sigan muriendo ni teniendo tratos injustos en su tránsito o en las sociedades de llegada.
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